Los derechos televisivos son la principal fuente de ingresos de los clubes españoles para retener a sus estrellas, como Messi o Cristiano Ronaldo. Sin embargo, a Movistar, Vodafone u Orange no les salen las cuentas porque la oferta es superior a la demanda, mientras LaLiga y Mediapro esperan un nuevo comprador. El recomendador online ysi.si ejerce como árbitro en esta ‘guerra del fútbol’ al ofrecer una perspectiva independiente y propone algunas claves para entender si las operadoras van de farol o si realmente el fútbol es poco rentable.
La noticia bomba del Mobile World Congress (MWC) de Barcelona no está relacionada con la presentación de un terminal de última generación, sino que tiene que ver con el deporte rey. Según el consejero de Vodafone España, Antonio Coimbra, “en nuestro país es más rentable perder a todos los clientes que pagar por tener el fútbol”. Una opinión que se suma a la corriente que ya iniciara Movistar, para quien empieza a no ser productivo adquirir los derechos de Primera División o la Champions.
Mientras tanto, LaLiga va a sacar próximamente el paquete del nuevo trienio y nadie presenta sus credenciales para colocarse en la pole position. Una situación que se repite para la emisión de la Champions. A partir de septiembre no habrá partido en abierto y desaparece el horario unificado. Mediapro, dueño de los derechos para la emisión del torneo continental en España, espera la llamada de las principales operadoras, pero ninguna quiere dar el primer paso. De hecho, se especula que las multinacionales Amazon y Facebook podrían estar interesadas en su compra.
Pero, ¿realmente es tan poco rentable el deporte más seguido en España? La plataforma online ysi…, expertos en recomendaciones de paquetes de telefonía, televisión, Internet…, conoce a la perfección el comportamiento de usuario de estas plataformas, y asegura que en un gran porcentaje el fútbol es uno de los factores para determinar si se opta por un medio u otro, por lo que las operadoras se enfrentan a un dilema grande: hacer marca y ganar usuarios pese a que puedan perder dinero u olvidarse de esa estrategia con el riesgo que supone la pérdida de clientes.
