Hace apenas cinco años casi todos los datos sobre el sector turístico en España eran más bien desalentadores. Sin embargo, esa situación ha dado un vuelco en los últimos meses, y hoy este sector representa el 11% del PIB de España.
El perfil del turista ha cambiado y la tecnología ha tenido mucho que ver en esto. Es por ello que Barceló Viajes, Vector ITC Group, y Oracle organizó ayer un desayuno tecnológico donde se analizó la transformación digital al servicio del turista 3.0.
El sector turístico se enfrenta a un nuevo consumidor: el turista 3.0, aquel que reserva sus viajes online, ese que apenas lleva equipaje y que cuenta con el móvil como su mejor y más fiel acompañante. En él puede encontrar toda la información que necesita: cámara, guías de viaje, amigos, transporte, previsiones, opiniones de otros viajeros…
En definitiva, se trata del adprosumer, una nueva generación de usuarios, nativos digitales, que van un paso más allá y se convierten en productores de contenidos y de tendencia, al compartir sus impresiones de viaje, sus opiniones sobre los lugares y sus recomendaciones sobre empresas, productos y servicios.
En este contexto, las necesidades a las que se enfrentaba Barceló Viajes para conquistar a este perfil de viajero eran tres: mantener un posicionamiento diferencial ante la competitividad del sector, aprovechar la madurez del sector promoviendo el desarrollo de nuevos modelos de negocio y optimizar las interacciones con este nuevo cliente digital, quien impone reglas de juegos diferentes a las conocidas hasta el momento.
“El turista ha aligerado su equipaje. Los dispositivos móviles, la conexión a Internet y el desarrollo de las apps con multitud de funcionalidades, han creado un nuevo perfil de viajero que hace las fotos de su viaje desde su Smartphone y las comparte, reserva sus vuelos, comparte coche para ir al aeropuerto, se interesa por los museos que incluyen visita virtual, comparte sus experiencias con amigos y familia en todo el ciclo de disfrute de su experiencia, de hecho, muchas de sus decisiones se basan en la experiencia vivida por otros turistas.