Hace diez años, Kaspersky Lab anunciaba el descubrimiento de Cabir – el primer gusano diseñado para atacar a teléfonos móviles.
A diferencia de la mayoría de los ejemplares de malware modernos, Cabir no estaba equipado con una amplia gama de funciones maliciosas, pero hizo historia al demostrar que era posible infectar también estos dispositivos.
Los expertos de Kaspersky Lab detectaron Cabir por primera vez a principios de junio de 2004. Uno de los analistas de virus de la compañía estaba terminando su turno, cuando detectó un email sin texto pero que contenía un archivo adjunto.
El archivo era malicioso, pero a simple vista era imposible determinar para qué plataforma se había escrito. Definitivamente, no había sido diseñado para Windows o Linux, las plataformas en las que los analistas de Kaspersky Lab trabajaban normalmente.
Diez años después del descubrimiento de Cabir, la colección de malware móvil de Kaspersky Lab incluye más de 340.000 de ejemplares únicos, con más del 99% dirigido a Android.