El brote de coronavirus en la provincia china de Hubei está obligando a Foxconn a mantener sus fábricas cerradas hasta el 10 de febrero, según nuevos informes.
Potencialmente, esto podría tener graves consecuencias para el mayor cliente del fabricante del contrato, Apple, y su próxima línea de iPhone. Apple ya espera una caída del 10% en los envíos de iPhone y ha cerrado sus tiendas y oficinas en China hasta el 9 de febrero.
La semana pasada, Foxconn emitió una declaración oficial en la que cree que los envíos de iPhone no se ralentizarán y ha tomado medidas para continuar cumpliendo con sus obligaciones de fabricación. Estos incluyen trasladar la producción a fábricas en Vietnam, India y México para llenar el vacío. Además, Foxconn planea emitir turnos de horas extras después de que se levante la prohibición para compensar los retrasos actuales.