El imparable crecimiento del Ecommerce ha convertido al cliente en un consumidor mucho más exigente con el paso de los años. Al principio, el simple hecho de no tener que desplazarse para adquirir un producto ya satisfacía al usuario.
Sin embargo, cada vez se da más importancia a rapidez en la distribución. Precisamente ahí, en la última milla, término que hace referencia al momento en el que el producto llega al consumidor final, se encuentran los grandes problemas del Ecommerce.
El principal problema en las entregas de las compras online se debe al ritmo de vida actual. Entre el trabajo y los quehaceres diarios, nos resulta imposible perder una mañana esperando al transportista. De ahí que actualmente en España el 90% de las entregas que resultan fallidas sea por ausencia del cliente en su domicilio, tal y como confirman desde Celeritas.
“Para que una compra online resulte útil, eficaz y sobre todo nos ahorre tiempo debe ser un proceso completo de principio a fin, sin embargo, con los métodos de entrega, hasta ahora, eso no ha sido posible”, explica Carlos Carrasco, CMO de CITIBOX.
¿Por qué fallan las entregas? Según el estudio de Logística Ecommerce realizado por EY y el Foro de Economía Digital, el 34% de las incidencias en los envíos están relacionados con los plazos de entrega. En muchos casos, las quejas de los consumidores se deben al incumplimiento en cuanto a la fecha o la franja horaria acordado.