Uno de los actos que caracteriza al Miércoles Santo malagueño es la tradicional liberación de un preso por parte de la Cofradía de El Rico. Este año será José, interno en el Centro Penitenciario Málaga II, ubicado en Archidona, y condenado por un delito contra la salud pública.
El acto de indulto regresará a la plaza del Obispo, tras realizarse el pasado año de forma extraordinaria en la Catedral y liberar a tres penados a causa del parón obligado por la crisis sanitaria derivada de la pandemia.
De esta forma se da cumplimiento a una tradición que cumple más de dos siglos y medio tras el privilegio otorgado a la Cofradía de Nuestro Padre Jesús El Rico y María Santísima del Amor en 1759 por el rey Carlos III, de poner en libertad a un condenado en un momento del desfile procesional por las calles de la capital malagueña y en presencia de los sagrados titulares.
Según esta tradición, había en Málaga entonces una peste y, al afectar también a la prisión, los penados, sin despojarse de las cadenas, decidieron salir a la calle y llevar la imagen de Jesús El Rico, conservada en su capilla, en procesión por los lugares más afectados por la epidemia.
