Año tras año, salen al mercado una gran cantidad de smartphones y, aunque sus características técnicas sean prácticamente las mismas que las del modelo anterior, provocan en el consumidor la necesidad de renovar sus terminales continuamente. En este sentido, según Counterpoint, sólo de abril a junio de 2019 se vendieron 354 millones de smartphones en todo el mundo.
Esta situación contribuye a que cada vez se produzca más chatarra electrónica en el mundo. Según un informe de Naciones Unidas, sólo en 2018 se generaron casi 50 millones de toneladas de basura electrónica.
A pesar de ello, los consumidores son cada vez más conscientes de la necesidad de hacer un consumo responsable de estos aparatos y optan por las alternativas ecológicas que ya ofrece el mercado. “Conservar nuestros smartphones durante el máximo tiempo posible es la mejor forma de reducir los residuos electrónicos que se generan”, afirma Vianney Vaute, cofundador de Back Market. En este sentido, los teléfonos reacondicionados, los teléfonos modulares y los teléfonos fabricados con materiales reciclables, se presentan como las alternativas más ecológicas que existen actualmente en el mercado: