Hace años que se descubrió que las webcam de nuestros ordenadores se pueden convertir en espías silenciosos de nuestra actividad: las denominadas Remote Administration Tools (RAT) dan acceso a los cibercriminales y curiosos a ese componente, y eso ha hecho que muchos tomen (tomemos) una medida peculiar: tapar las webcams.
La práctica se ha ido volviendo más y más común a medida que la sensibilidad sobre nuestra privacidad y seguridad se ha acrecentado estos últimos años, pero ahora el consejo de tapar la webcam de nuestros dispositivos nos llega de alguien sorprendente: el mismísimo director del FBI.
Una práctica cada vez más extendida
Hace unos meses se descubrió cómo, James Comey, el máximo responsable del FBI estadounidense, cubría la webcam de su portátil con un poco de cinta adhesiva.
En una conferencia reciente le preguntaron por el tema, y Comey dejó clara su opinión: “Hay algunas cosas sensibles que deberías hacer [para protegerte], y esa es una de ellas”.
