Si a Papá Noel o los Reyes les ha fallado la magia y este año no han acertado con tus regalos, aún tienes otra oportunidad. Sigue ensayando la mejor de tus sonrisas, agradece cada cosa que recibas por eso de que la intención es lo que cuenta y considera el mercado de segunda mano para poner el artículo de nuevo en circulación y que otra persona lo disfrute.
Según una encuesta realizada por Wallapop, la aplicación móvil española para la compra-venta de productos de segunda mano, 6 de cada 10 españoles ha llevado ya a cabo la práctica del ‘regifting’ para deshacerse de algún obsequio.
La venta de regalos no deseados aumenta también en estas fechas por posibles incidencias relacionadas con la devolución en tienda. La pérdida o ausencia del ticket regalo, así como los plazos y los costes a la hora de descambiar un producto son factores que incitan a los consumidores a considerar el mercado de segunda mano como una alternativa fácil y cómoda para desprenderse de lo que no quiere o no necesita.
En general, el 32% de los españoles vendería sin dudarlo aquellos regalos que no han cumplido con sus expectativas.
En la misma línea, 4 de cada 10 encuestados comenta que recurriría a la reventa, pero necesitaría primero un motivo.
Entre las razones por las que se opta a dar salida a un regalo, la mayoría (79%) lo hace por el escaso uso del producto. Y es que antes de relegarlos al olvido, intentan sacar al menos algo de provecho. Una de cada 4 personas se lo plantea en momentos de escasez económica. El 17% termina por decidirse cuando el regalo es caro y puede recibir a cambio bastante dinero.
El 32% de los españoles no se anda con rodeos y se deshacen de estos objetos si los considera una horterada. Tampoco apreciamos demasiado las cosas que nos regaló algún ex (19%). En ese caso, ellos tienen menos reparo que ellas y un 80% se queda lo que sea de quien sea si les gusta, según Wallapop.
Sin embargo, en el fondo, nos remuerde un poco la conciencia y no tiramos (accidentalmente) lo que no nos convence. El 19% recurre a la venta en segunda mano con tal de no ofender a quien le hizo el regalo. Los más respetuosos en este sentido son los usuarios mayores de 25 años, quienes justifican así esta decisión en 1 de cada 5 ocasiones.
Pocos se atreven a contar lo que hace a espaldas del otro. Sólo el 38% usuarios tendría el valor de confesar a esa persona que su regalo no le gusta en absoluto. Y es que aunque excusas no nos faltan, mejor nos las reservamos.
