Microsoft no cambiaría su posición por la de Sony, apuestan por Xbox One frente a la flamante PlayStation 4, una consola 100 euros más económica que la de Redmond.
“No. Nos mantenemos fieles a nuestra visión de que queremos estar dónde están nuestros consumidores. Creemos que los patrones de consumo digital cambiarán y crecerán con el tiempo”.
“Queremos ofrecer a los consumidores el poder elegir, estando en cualquier formato que nuestros clientes estén buscando”.
“Como negocio, en el momento en el que no escuchemos a nuestros clientes con atención y no nos adaptemos de manera adecuada, entonces estaremos en un lugar peligroso”.
“Estamos en una posición envidiable en comparación con cualquier otro. No me cambiaría el lugar con nadie. Es un gran momento”, explica el vicepresidente de Microsoft Europa Chris Lewis.