Es cierto que todavía hay mucha tela que cortar en lo que respecta a cuál será el caballo ganador en la próxima generación de consolas, pero si nos fiamos de las demostraciones que los fans vienen haciendo en las redes sociales, parece que, al menos en un primer instante, Plasyation 4, de Sony, se alza con el puesto de favorita.
Pese al poderío técnico y el enorme arsenal de innovaciones y catálogo de que hace gala la nueva creación de Microsoft, lo cierto es que la compañía no ha conseguido ganarse el corazón de los usuarios, debido a una medida que hace tiempo se venía barajando: la posibilidad, o no, de poder prestar o revender los videojuegos usados por parte de sus compradores.
El mercado de segunda mano, que mueve millones, es una pieza del pastel que Microsoft no ha querido perderse, de manera que los usuarios no podrán prestar o revender los títulos comprados, salvo que paguen un extra.
Microsoft ha tratado de matizar que esto es debido a las especificaciones técnicas de Xbox One, cuyos juegos han de estar guardados en la memoria de la videoconsola, pero la realidad es que esta medida ha enfurecido notablemente a la comunidad de usuarios.
No es así en el caso de Sony. Ésta ha sabido prever este imprevisto dejando la situación tal cual está, al menos por ahora. Esto, unido al hecho de que su consola saldrá al mercado por 100 euros menos que Xbox One, y que técnicamente serán muy similares, parece que ha terminado por decantar la balanza a su favor.
El mercado de los videojuegos ha ganado desde sus inicios una rápida expansión, acelerada en los últimos tiempos por la proliferación de formatos, géneros y diversidad de ofertas.
Los videojuegos para Smartphones y Tablets en forma de apps, las redes sociales y los casinos online, como Botemanía en España, dan un nuevo punto de enganche para los aficionados de este negocio, tradicionalmente dominado por las videoconsolas y los ordenadores.
