Xbox One no necesita de Kinect para vivir, Microsoft lo implementa porque el usuario disponga de él, no se sabe si aún existe la posibilidad de un pack sin este.
La videoconsola llegará a un coste de 499 euros, la consola pasa el examen de tener y contar con casi el mejor hardware del mercado junto a la PS4.
“Como el online, la consola todavía funcionará si Kinect no está enchufado, aunque no seréis capaces de usar ninguna de sus características o experimentar los exclusivos usos del sensor”.
“Cuando Kinect está enchufado, tienes la posibilidad de desconectar el sensor en las opciones de la consola. Cuando está en este modo, el sensor no recoge ninguna información. Cualquier funcionalidad relacionada con voz, vídeo o gestos no funcionará”.
“Si estás en este modo y entras en una experiencia exclusiva de Kinect, recibirás un mensaje preguntándote si quieres activarlo para continuar”.